My name is Earl o Me llamo Earl, como lo conocemos aquí, es una comedia americana ganadora de varios premios, entre ellos un Premio Emmy. Su creador es Greg García.
Su protagonista es Earl J. Hickey, un delincuente de poca monta que no tiene respeto por nada y por nadie. Un día gana en la lotería 100.000 dólares y antes de cobrar el dinero pierde el boleto al ser atropellado por un coche. Convaleciente en el hospital su mujer le pide el divorcio, y entonces, en la televisión de la habitación del hospital, escucha hablar sobre el “karma”. Comprende que su mala suerte está causada por su estilo de vida. Este descubrimiento le hace cambiar de vida y replantearse su relación con el mundo. Este cambio se materializa en una lista de errores cometidos en su vida para ir tachándolos según los va enmendando. Tras un par de buenas acciones, Earl encuentra el boleto perdido de lotería: “lo del karma funciona”. Con la tranquilidad que le da el dinero ganado en la lotería, Earl dedica su tiempo a rectificar las malas acciones que escribe en su lista y las tacha una vez solucionadas. Según avanzan los capítulos va tachando malas acciones pero también añade nuevas maldades según va recordándolas. El mismo Earl es el narrador de la serie y mediante flashbacks vemos cómo era antes de encontrar el “karma”. A veces, el karma no sólo es el tema conductor de la serie, sino que es como un personaje que va guiando las acciones de Earl, incluso se dirige al karma como si fuera una deidad o algún tipo de espíritu poderoso.
En el primer episodio Earl se difine como el “esclavo del karma” y respecto a la lista, poco a poco vamos comprendiendo que es la manifestación física del karma. El comportamiento de Earl es curioso, ¿Actúa para ganar “buen karma” o está sinceramente arrepentido de haber hecho el mal toda la vida? Yo creo que Earl es sincero, en ocasiones siente las ventajas de hacer el bien y a veces hace cosas que no están en la lista. La serie me gusta, es divertida y en cierto modo positiva, “haz el bien y te pasarán cosas buenas”. Quiero destacar las conversaciones de Earl con su hermano Randy cuando están en la cama, (los dos hermanos duermen juntos) me recuerdan mucho a Epi y Blas. Qué decir de la banda sonora... un amante del buen rock no puede pedir más, Born to be wild (Steppenwolf) , Highway to hell (AC/DC), Highway star (Deep Purple), Peace Frog (The Doors)... etc.
Su protagonista es Earl J. Hickey, un delincuente de poca monta que no tiene respeto por nada y por nadie. Un día gana en la lotería 100.000 dólares y antes de cobrar el dinero pierde el boleto al ser atropellado por un coche. Convaleciente en el hospital su mujer le pide el divorcio, y entonces, en la televisión de la habitación del hospital, escucha hablar sobre el “karma”. Comprende que su mala suerte está causada por su estilo de vida. Este descubrimiento le hace cambiar de vida y replantearse su relación con el mundo. Este cambio se materializa en una lista de errores cometidos en su vida para ir tachándolos según los va enmendando. Tras un par de buenas acciones, Earl encuentra el boleto perdido de lotería: “lo del karma funciona”. Con la tranquilidad que le da el dinero ganado en la lotería, Earl dedica su tiempo a rectificar las malas acciones que escribe en su lista y las tacha una vez solucionadas. Según avanzan los capítulos va tachando malas acciones pero también añade nuevas maldades según va recordándolas. El mismo Earl es el narrador de la serie y mediante flashbacks vemos cómo era antes de encontrar el “karma”. A veces, el karma no sólo es el tema conductor de la serie, sino que es como un personaje que va guiando las acciones de Earl, incluso se dirige al karma como si fuera una deidad o algún tipo de espíritu poderoso.
En el primer episodio Earl se difine como el “esclavo del karma” y respecto a la lista, poco a poco vamos comprendiendo que es la manifestación física del karma. El comportamiento de Earl es curioso, ¿Actúa para ganar “buen karma” o está sinceramente arrepentido de haber hecho el mal toda la vida? Yo creo que Earl es sincero, en ocasiones siente las ventajas de hacer el bien y a veces hace cosas que no están en la lista. La serie me gusta, es divertida y en cierto modo positiva, “haz el bien y te pasarán cosas buenas”. Quiero destacar las conversaciones de Earl con su hermano Randy cuando están en la cama, (los dos hermanos duermen juntos) me recuerdan mucho a Epi y Blas. Qué decir de la banda sonora... un amante del buen rock no puede pedir más, Born to be wild (Steppenwolf) , Highway to hell (AC/DC), Highway star (Deep Purple), Peace Frog (The Doors)... etc.
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