miércoles, 30 de abril de 2008

¿Qué es un Laico Dominico?




Hay un detalle en la bibliografía de Juan Pablo II, durante sus años en la Polonia ocupada por los nazis, que siempre que la leo me inspira y me da fuerzas. Es el momento en el que el joven Karol decidió entrar en el seminario como un modo de vivir, en actitud de resistencia, ante la degradación de la dignidad humana perpetrada por una ideología brutal, un pensamiento débil, el nihilismo y el relativismo. Al igual que en aquella época este sigue siendo el problema del mundo. Y al igual que Karol Wojtyla también nosotros debemos vivir en una actitud de resistencia ante el nihilismo y el pensamiento débil. La impresión de que las cosas podrían ser mejores, es una sensación que tenemos todos, el problema es cómo hacer para que el mundo que nos rodea sea mejor. Somos protagonistas de la parábola de los talentos, Dios nos ha dado una posibilidad, y debemos aprovecharla. Debemos responder a las nuevas formas surgidas del Concilio Vaticano II, donde el laicado toma un papel importante. Somos cristianos y como tales respondemos con nuestra vida a la realidad que nos toca vivir. Hoy el laico reclama madurez en la experiencia de fe y madurez en las tareas y funciones realizadas en virtud de su fe. Muchas Iglesias locales salen adelante gracias a la participación de los laicos, que conscientes de su vocación cristiana y sus posibilidades para la trasmisión del mensaje evangélico, trabajan en colaboración con sus párrocos, avanzando cada día en el descubrimiento y realización de esa colaboración en la Iglesia. Los laicos aportamos a la Iglesia algo muy importante, nuestra inserción en el mundo, nuestra participación en los problemas y en las urgencias de la vida diaria, nuestra fe, nuestra competencia profesional, nuestras pequeñas habilidades, es decir, el laico es fermento en medio de la masa.
Soy Laico Dominico, y a mi identidad laica hay que unirle la identidad dominica, una identidad que habla de una manera peculiar de vivir en cristiano. Soy un dominico, un miembro de la Orden de Predicadores, el sustantivo dominico denota lo que soy, laico describe qué tipo de dominico soy. También soy ese hombre común que se levanta por las mañanas y va al trabajo, que está presente en el centro del problema. Los laicos dominicos queremos colocarnos ante el complejo mundo de hoy con un nivel de formación adecuado que nos permita situarnos en primera línea ante el diálogo ciencia y fe, en la lucha por los derechos del ser humano, ante el reto del ateísmo y el agnosticismo, ante los problemas de la riqueza y la pobreza, queremos hacerle frente a los problemas que surgen de la política, etc. Esto exige actuar desde la reflexión y la conciencia clara de nuestra misión, que excluye la superficialidad y la ambigüedad como forma de situarse ante la vida. A lo largo de la vida, cambiando o perdiendo su trabajo, mudándose de residencia, casándose, enviudando, criando niños, jubilándose, la participación de un laico dominico en diversos apostolados es variada. Desde el s.XIII somos conocidos como la Tercera Orden de Dominicos o Dominicos Terciarios, hoy, simplemente somos Laicos Dominicos, hombres y mujeres organizados en fraternidades para construir la rama seglar de la Orden de Predicadores, los Dominicos.
Hoy más que nunca tiene sentido ser laico dominico, acercar a Dios a los hombres, desde dentro de una sociedad cada día mas lejos de Dios, llevar a Cristo a los hombres que viven con nosotros y no saben quién es Cristo. Jesús fue hijo, fue aprendiz, fue trabajador, fue alumno, fue maestro... fue muchas cosas que también somos nosotros.
También como dominicos no debemos ejercer esta labor sin preparación y sin una formación adecuada y sabemos muy bien lo entrelazado que está en nuestra vida el estudio, la oración y la compasión. Para un dominico el estudio es algo más que un acopio de conocimientos, es un ejercicio continuo de flexibilidad y de apertura, una lucha contra el dogmatismo, pero sin dejar de beber de las fuentes de la Palabra y la Tradición. Estudiar en clave dominica es examinarlo todo y quedarse con lo bueno. Pero todo conocimiento está cojo si no parte del conocimiento del misterio de Jesucristo. El dominico nunca ha rechazado la luz que la ciencia arrojaba sobre la verdad y nunca debe dejar que se abra una brecha entre ciencia y fe. El estudio es también una forma de oración, la profunda y afectuosa penetración en las Sagradas Escrituras y la reflexión teológica que la rodea es una forma más de descubrir y de entrar en la objetividad de Dios. Contemplar y dar a los otros lo contemplado, el viejo lema de los frailes dominicos, también es exigible para los laicos dominicos. El estudio de la Palabra de Dios, la búsqueda de la verdad y el diálogo con nuestra sociedad es esencial para nosotros, ¿Cómo vamos a anunciar algo que no entendemos? ¿Cómo hablar de Dios si no tenemos palabras que expresen lo que sentimos y vivimos?
Es necesario el diálogo con la nueva cultura que se va abriendo en Europa, hay que descubrir lo que hay de positivo en ello, y sin miedo, denunciar sus excesos y sus peligros. La gente de hoy en día tiene unas convicciones religiosas eclécticas, no tienen muy claro en lo que creen, creen en Dios pero no en la Iglesia, y creen en su propio Dios que fabrican con trozos de aquí y de allá. El hombre contemporáneo quiere una religión a la carta y con descuento al final. Cuanto más mustia es la sociedad en lo religioso más se corre el peligro de la aparición de movimientos tradicionalistas y fundamentalistas. Así que es fácil ver que la sociedad postmoderna es tierra de misión, hay necesidad de reevangelizar occidente. La reevangelizacion es más difícil que la evangelización ya que no se encuentran mentes limpias sino mentes resabidas que no aceptan el diálogo en cuanto sospechan que se va a hablar de Dios. Es necesario, como nos enseñó Santo Domingo de Guzmán, hablar de Dios y con Dios, como sea, con hechos o con palabras.

sábado, 26 de abril de 2008

Cardenal Newman




El milagro sobre un diácono de Boston atribuido al siervo de Dios Cardenal John Henry Newman permitirá su próxima beatificación, y me da pie para traerlo aquí y conocer un poco más a este verdadero genio y bendición de la Iglesia Británica. Someramente se puede decir que el Cardenal John Henry Newman nació en 1801 , fue admitido por la Iglesia Católica el 9 de octubre de 1845, fue ordenado sacerdote católico (era sacerdote anglicano) el 1 de junio de 1847 en Roma y lideró el Movimiento de Oxford que buscaba las raíces católicas de la fe en Inglaterra, siendo nombrado cardenal el 12 de mayo de 1879.

Es interesante su conversión al catolicismo. En un principio, él se ordenó pastor anglicano y llegó a considerar al Papa como un anticristo. Poco a poco, junto a los miembros del llamado movimiento de Oxford, Newman comenzó a argumentar que la doctrina de la Iglesia que se definía en el Concilio de Trento era compatible con los Treinta y nueve Artículos de la Iglesia Anglicana del siglo XVI. A partir de 1842 empieza a vivir en condiciones monásticas y escribe "Ensayos sobre el desarrollo de la doctrina cristiana". Newman se fue reconciliando con el credo y la liturgia católica gracias a sus estudios sobre la relación de la Iglesia Anglicana y la Católica. En 1843 publicó una retractación formal de todas la afirmaciones que años antes había pronunciado contra Roma. En 1845, rindiéndose a sus propios argumentos sobre la relación entre Anglicanos y Católicos Romanos, se convirtió al catolicismo. Fue recibido por la Iglesia el 9 de octubre de 1845 y ordenado sacerdote católico el 1 de junio de 1847. Le tocó vivir una época difícil, Juan Pablo II se refería a ella diciendo que Newman había vivido cuando las antiguas certidumbres se tambaleaban y los creyentes se enfrentaban con la amenaza del racionalismo por una parte y del fideísmo por otra. En un mundo así, continua Juan Pablo II, Newman estableció una síntesis memorable entre fe y razón. Newman sintió que Dios no hace nada en vano y afrontó las tribulaciones que el lugar de menoscabarle le reforzaron su fe en el Dios que la había llamado. De hecho tenía que lidiar con las críticas de católicos que le acusaban de una conversión no sincera y anglicanos que lógicamente no compartían su conversión. Newman fue un grandísimo intelectual, se puede decir sin miedo a equivocarse, que puso una importante piedra donde el Concilio Vaticano II debía apoyarse. Su conversión fue muy meditada, aunque no tuvo que hacer grandes cambios espirituales para pasar del anglicanismo al catolicismo. Ser cristiano es una de las características definitorias del hombre europeo se pongan como se pongan los irreligiosos y Newman se dio cuenta de ello en su profundización en el anglicanismo que le hizo llegar al catolicismo. Bajo toneladas de ideologías, convencimientos inamovibles y dogmática, subyace una única verdad, que Jesús de Nazaret es el Hijo de Dios vivo. Newman no se hizo católico por simpatía, sino por la convicción de que debía seguir la verdad estuviese donde estuviese, y en el catolicismo la encontró. Él mismo dijo que al abandonar la Iglesia Anglicana abandonaba todo lo que el amaba, el mundo en el que se había criado y en lo que había creído.

No es un secreto que Benedicto XVI, grandísimo intelectual, tiene entre sus devociones al Cardenal Newman desde sus primeros años de seminario en 1946. Si no contamos los mártires, Newman será el primer inglés elevado a los altares desde el s.XVI.





viernes, 25 de abril de 2008

Cerca



Cerca del frío de la luz azul,

como una lejana estrella sin voz,

como sólo tú me has querido,

oímos , anhelantes, los tristes besos que guardo entre rosas.


Cerca, muy cerca de la esperanza,

aquella que vendrá a por mí,

aquella que insomne, exaltada

nos ahoga y pone sus ojos en un acabado raudal de rosas.


Cerca, con huesos rotos y luz mustia,

por todo lo que sangra la vida,

por todo lo que el mar salpica cuando rompe,

sólo quiero una palabra, una primera brisa, como de tu mano una rosa.


Cerca de la crédula infancia,

cuando llena de pajaritos te rindes,

cuando el amor no pasa de deseo,

se quedó la tarde, temblona, siempre indecisa, entre moho y rosas.


Cerca del sueño de dulce luz,

cerca veo ya los caminos,

cerca llegamos a la muerte,

cuando viste el cuerpo como telarañas de infinito rosa.
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jueves, 24 de abril de 2008

El encanto errante


Qué bello es el encanto errante de un cénit poderoso,

triste y bello, es el pensamiento de tierra, divino y eterno.

Pesan en la noche las lentas horas, el suspense tenebroso,

como un fantasma de alma impasible que ha de decorar la mañana.

Luz, viento y música, todo espléndido y sin embargo monótono.

Qué bello es el jardín desnudo de un cénit poderoso.


La cara oculta susurra con cuidado entre hojas secas

que vivir es jugar y que en la soledad el que ríe llora.

Quédate, llora con lágrimas, luego moja el pan,

que aquí estoy arrinconado en la puerta y sin salir de la sombra.


Qué bellos son, embuste, miedo y muerte, el sol y la luna.

Y dicen que me sepultan los instantes en los que viene la costumbre,

que con paz me sepultan los que en un instante muestran frío y alivio.

Qué bello es el encanto errante de un cielo acostumbrado.
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martes, 22 de abril de 2008

Focas


Dios dijo: "Que la tierra produzca toda clase de seres vivientes: ganado, reptiles y animales salvajes de toda especie". Y así sucedió. Dios hizo las diversas clases de animales del campo, las diversas clases de ganado y todos los reptiles de la tierra, cualquiera que sea su especie. Y Dios vio que esto era bueno. Dios dijo: "Hagamos al hombre a nuestra imagen, según nuestra semejanza; y que le estén sometidos los peces del mar y las aves del cielo, el ganado, las fieras de la tierra, y todos los animales que se arrastran por el suelo". Y Dios creó al hombre a su imagen;lo creó a imagen de Dios, los creó varón y mujer. Y los bendijo, diciéndoles: "Sean fecundos, multiplíquense, llenen la tierra y sométanla; dominen a los peces del mar, a las aves del cielo y a todos los vivientes que se mueven sobre la tierra". Y continuó diciendo: "Yo les doy todas las plantas que producen semilla sobre la tierra, y todos los árboles que dan frutos con semilla: ellos les servirán de alimento. Y a todas la fieras de la tierra, a todos los pájaros del cielo y a todos los vivientes que se arrastran por el suelo, les doy como alimento el pasto verde". Y así sucedió. Dios miró todo lo que había hecho, y vio que era muy bueno. Así hubo una tarde y una mañana: este fue el sexto día.
Gen 1,20-31

Dios nos da toda la creación para someterla a nosotros, para servirnos de ella con la herramienta de la que estamos dotados y que no es otra cosa que inteligencia. Dios nos deja en la creación y no nos dice, os hago los amos del mundo para que seaís depredadores, para que devoreis todo cuanto encontreis a vuestro paso.

El mundo no es eterno, no lo aguanta todo y ademas es fruto del amor de Dios. El mundo ha sido creado para gloria de su creador, es el lugar donde vive el hombre, que debería ser imagen de Dios, y todos los demás seres, también criaturas de Dios. El mundo ha sido entregado al hombre para que lo cuide y lo cultive. Dios encomienda al hombre el dominio de la creación, pero no es un dominio despótico ni arbitrario, se trata solo de amar lo que Dios ama. El trabajo sobre la creación es una manera de servir al creador a través de lo creado, Dios habla de uso y no de abuso. El hombre es solo un adiministrador que debe amar lo que se le encomienda, entre otras cosas porque forma parte de lo administrado y cualquier mal ejercido sobre lo administrado es ejercido contra el dueño y contra el mismo administrador. El sometimiento de la creación bajo el hombre de la que habla el Génesis no es otra cosa que una relación ordenada entre el hombre y la naturaleza. Las capacidades intelectuales y espirituales de la persona deben ser utilizadas para conservar y completar la obra de Dios. Lo que hacemos al mundo y sus criaturas se lo hacemos a Dios.

Las focas de Canadá son también criaturas de Dios.

Cada año, sobre los hielos de la Península del Labrador y de Newfoundland, al abrirse la primavera, tiene lugar la mayor carnicería mundial de mamíferos. Cientos de miles de focas, de entre 12 días y 12 meses de edad, mueren a golpes para que su preciada piel, su grasa y sus penes lleguen al mercado occidental como productos de lujo, dietéticos o afrodisíacos. Las focas son despellejadas vivas para que los diseñadores occidentales presenten sus colecciones de moda y se fabriquen cosméticos. Firmas como Prada o Versace, o productos con omega-3, utilizan en sus productos derivados de focas. Las más demandadas son las focas con un par de semanas de vida por su piel de un blanco purísimo. Si queremos hacer algo, no debemos comprar productos que contenga cualquier derivado de foca ni debemos consumir marisco canadiense. El boicot al marisco de Canadá, bien implementado, podría acabar con esta matanza comercial. Los cálculos más optimistas estiman en 16 millones de dólares la ganancia de esta matanza, y las exportaciones de marisco de Canadá a Estados Unidos son de 3.300.000 millones de dólares. Por tanto, el valor real de la matanza de focas equivale al 0,48% de las exportaciones de Canadá a Estados Unidos en marisco. Con un 25% de descenso en esta venta de mayorista, serán 825 millones de dólares de pérdida, 51 veces el valor de la matanza de focas. La presión de las pérdidas económicas sobre este otro importante sector provocará serios conflictos, y si tienen que elegir, eliminarán la caza de focas, que genera menos ingresos. Todo esto y más está en las dos webs que pongo abajo.

PERO POR FAVOR, NO ENTRES SI TE VAS A IMPRESIONAR YA QUE PARA EXPLICAR DETALLADAMENTE EL PROBLEMA SE INCLUYEN IMAGENES BASTANTE FUERTES.

http://www.altarriba.org/matanza-de-focas/index.html

http://www.altarriba.org/peticion-focas.htm

SI NO HAS QUERIDO VER LAS WEBS, COSA QUE ME PARECE NORMAL, SOLO FIRMA AQUÍ PARA PODER PARAR A ESTOS DEMONIOS

http://www.altarriba.org/peticion-focas.php

lunes, 21 de abril de 2008

Angelo Roncalli



El rabino Simón Moguilevsky definió en una ocasión a Angelo Roncalli como un verdadero hombre enteramente creado a la imagen de Dios. Esta palabras hacían referencia a la importate labor de este gran hombre durante la Segunda Guerra Mundial. El entonces Monseñor Roncalli ya era querido antes de la Guerra Mundial por la comunidad católica de Bulgaria. Como ejemplo de su infinita caridad, decir que, ofreció cuidados gratuitos a los heridos por el atentado que intentó acabar con la vida del Rey Boris III en la Catedral Ortodoxa de Sofía, eran 300 heridos, de los cuales se ocupó Roncalli personalmente. Que en 1924 sofocó una ola de violencia anticatólica en una región de Bulgaria mediante la sola lectura de un sermón. O que durante el terremoto que devastó el centro de Bulgaria en 1928, Monseñor Roncalli compartió tienda de campaña junto con los que habían quedado sin hogar y consiguió alimentar con fondos del Vaticano aquella región por dos meses.

Poco antes de empezar la Guerra, en 1934, Monseñor Roncalli fue enviado a Estambul como delegado apostólico de Turquía y Grecia, lugar donde logró importantes acercamientos diplomáticos con estos dos países. Pero donde el genio y gracia divina de Angelo Roncalli se hizo notar fue en plena II Guerra Mundial, tiempo en que Estambul se convirtió en sede de la intriga y el espionaje. En 1940 Roncalli ayudó a un numeroso grupo de judíos polacos a escapar a Palestina, por entonces una colonia inglesa. Rechazo públicamente al embajador alemán Franz von Papen, aunque luego el propio Roncalli escribió una carta al tribunal de Nuremberg en la que declaraba que Franz von Papen había sido de gran utilidad dándole la oportunidad de salvar 24.000 judíos. En 1943 puso a disposición de los judíos alemanes 5.000 certificados de inmigración y solicitó a la Radio del Vaticano que difundiera que ayudar a los judíos era un acto de misericordia aprobado por la Iglesia. Con la ayuda del rey Boris de Bulgaria utilizó a la Cruz Roja para salvar a miles de judíos eslovacos deportados a Bulgaria. A petición del Gran Rabino de Jerusalén Isaac Herzog, intercedió por 55.000 judíos presos en Rumania.

Con todo esto ya bastaría para comprender que estamos ante la mejor de las personas, pero en 1944 quedaba todavía el reto más grande. Ese verano recibió la visita de la húngara Ira Hirschmann, una enviada de la Junta de Refugiados de Guerra y puso al día a Roncalli de las purgas antisemitas llevadas a cabo por Alemania en Hungría. Monseñor Roncalli ayudó, reforzó y amplió una red de emisión de certificados de bautismo a judíos llevada a cabo por monjas húngaras. Los Nazis reconocían dichos certificados por auténticos y tomaban a dichos judíos por cristianos húngaros. Ni a las monjas ejecutoras de los certificados ni a Monseñor Roncalli les importaba que estos certificados fueran falsos, ni que estos judíos nunca tuvieran la intención de convertirse realmente, lo que importaba era vivir. Roncalli utilizó correos diplomáticos, representantes del papado, y a las hermanas de Nuestra Señora de Zion para transportar y emitir certificados de bautismo, de inmigración y visados a judíos húngaros. La "operación bautismo" fue de tal envergadura que en febrero de 1945 se contabilizaron unos 100.000 judíos supervivientes. Posteriormente Roncalli fue enviado por el Vaticano a Francia como nuncio del Vaticano en París. En 1952, el Papa Pío XII le nombró Cardenal y Patriarca de Venecia y en 1958 se convirtió en el Papa Juan XXIII.

Angelo Roncalli, declarado beato por Juan Pablo II, se refería al holocausto judío como seis millones de crucifixiones.

Siempre he escuchado el apelativo de "Bueno" a este Papa, pero nadie me supo decir por qué, ahora ya lo se.

domingo, 20 de abril de 2008

Rosslyn


Quien más quien menos conoce la capilla de Rosslyn en Escocia, cerca de Edimburgo. Es la iglesia donde el inefable Dan Brown sitúa el clímax de su libro. Traigo al grimorio esta bonita capilla, que por cierto creo que nunca fue consagrada, porque un equipo de “decodificadores” afirma haber descubierto una partitura musical escondida durante 500 años en los intrincados grabados de esta iglesia. Parece ser que hay un código musical esculpido en los cubos de piedra de los nervios en los que se apoya el techo de Rosslyn. Este descubrimiento es de hace algunos años, pero todavía seguimos conociendo Rosslyn por un mal libro y no conocemos la verdadera Rosslyn.Los investigadores Thomas y Stuart Mitchell creen que los modelos en los cubos son los llamados patrones Chladni, creados por las vibraciones de diapasones musicales. ”Descubrir el código fue un verdadero momento de eureka. Es como si hubiéramos recibido un disco compacto del pasado”, afirmó Stuart Mitchell, de 41 años, un maestro de música de Edimburgo. ”Pero a diferencia de la ficción de ‘El código Da Vinci’, éste es un eslabón tangible con el pasado”, agregó. Su padre, de 75 años, quien fue decodificador para la Real Fuerza Aérea durante la Guerra de Corea, dijo que él pasó 25 años trabajando en el enigma. Con la partitura en la mano, los Mitchell produjeron una pieza musical a la que llamaron ”Rosslyn Motet”. Los expertos musicales se han abstenido de opinar sobre el presunto descubrimiento, pero no descartaron la teoría de los Mitchell. ”Hay 213 cubos (en Rosslyn) y la posibilidad de que tienen algo que decir no es inverosímil en absoluto”, afirmó Warwick Edwards, un experto en música escocesa antigua de la Universidad de Glasgow. Es necesaria más investigación, añadió. Gordon Munro, un experto en música eclesiástica escocesa en la Real Academia Escocesa de Música y Drama en Glasgow, dijo: ”He escuchado la música y no es imposible, pero puede ser sólo una reconstrucción que está abierta a la interpretación”. En el video se puede escuchar el tema musical junto con imágenes de la bonita iglesia de Rosslyn y una pequeña demostración de los llamados patrones Chladni, creados por las vibraciones de diapasones musicales.


jueves, 17 de abril de 2008

Libertad a la americana


Las palabras del Papa alabando la libertad religiosa de Estados Unidos, un lugar donde sus habitantes tienen todo el derecho del mundo a vivir y formarse de acuerdo a su credo y conciencia, a la inversa, son una fuerte advertencia a la vieja Europa donde ocurre todo lo contrario y no es el individuo sino el estado, demasiado todopoderoso, quien dicta cuál tiene que ser nuestra religión, a quién tenemos que adorar y cómo tenemos que educar a nuestros hijos. No me imagino yo a ningún político norteamericano y, mucho menos siendo un político electo, legislando contra un grupo de votantes creyentes, contra sus convicciones morales, contra la libertad de culto y de educación u ofendiendo día sí y día también a sus dirigentes espirituales.

La libertad religiosa es un derecho que, se supone, tenemos en los países llamados democráticos, para que cada ser humano elija libremente su religión o su ateísmo. Este derecho debería poder ejercerse públicamente, sin ser víctima de opresión, discriminación o castigo por parte del Estado. Este derecho está íntimamente relacionado con el derecho a la educación, en virtud del cual, todos los individuos que votan y pagan impuestos tienen derecho a formarse ellos mismos y educar a sus hijos de acuerdo con su conciencia y su sistema de creencias, sin que pueda venir ningún director de escuela del País Vasco a retirar la clase de Religión de las aulas solo porque dice que es de izquierdas, los curas le caen muy mal, y porque ya está bien de que los niños aprendan tonterías, como si los niños no se vieran obligados a aprender ninguna tontería hoy en día. En España, en teoría, la Constitución declara una total separación del Estado y la Iglesia, y declara la libertad de culto sin restricciones ni privilegios. ¿Quién se cree esto? que se lo digan a una Conferencia Episcopal sin libertad de expresión, a unos niños católicos con enormes irregularidades en su derecho a la libre elección de educación y de centro educativo, con cristianos que son mofa y befa de la sociedad cuando se defiende el derecho a la vida de los no-natos, o a una muerte digna. Olvidan nuestros políticos y olvidamos nosotros mismos que, aunque somos la parte confesional de un Estado aconfesional, somos todavía parte del Estado, y votamos y pagamos impuestos, quizás, más honradamente que otras personas que no tienen un mandamiento que dice "no robarás".

Las palabras del Papa Benedicto XVI en América me han hecho envidiar un poco a los americanos, no son perfectos, ni falta que les hace, pero tampoco obligan a nadie a serlo.

martes, 15 de abril de 2008

Dios o nada


Cada uno tiene su conciencia moral, es la que nos marca la medida de nuestros valores, y es, como sabemos algo personal, e intransferible. ¿Podemos hablar de superioridad ética de ciertos valores? Hay cosas obvias en las que la respuesta está clara, la sinceridad es más que el engaño, la ayuda al débil es más que su eliminación, la vida es más que la muerte. Hay otros supuestos en los que los valores exigen fe y en los que no todo el mundo está dispuesto a creer. En todo caso, de la misma forma que se da por supuesto el respeto a la conciencia moral de cada uno, es exigible el respeto a la conciencia moral basada en una revelación religiosa. Ambos tipos de vida moral y ética tienen derecho a comportarse según su patrón de perfección.
La ética, separándola de la religión se puede definir por su objetivo, la ética quiere una vida mejor. Cuando unimos la ética a la religión también la definimos por su objetivo, lo que se quiere es algo mejor que la vida. La ética religiosa es cosa de unos pocos, pero la ética es cosa de todos y debemos compartir unos mínimos tanto los que creen en Dios como los que no creen en Dios. Digo esto porque hoy en día, absolutamente todas la personas creyentes tienen intereses éticos, pero no todos los ateos o agnósticos tienen intereses éticos, ni siquiera están dispuestos a profundizar en esa ética subjetiva de cada uno de la que hablaba al principio, ni dispuestos a compartir unos mínimos éticos y morales con el resto de la comunidad. El aséptico cumplimiento de unas leyes sin juzgar su conveniencia ética y moral es donde se queda nuestra conciencia. Si la ley lo dice somos capaces de pasar por encima de las más elementales normas de la ley natural. No nos planteamos que quien hace la ley es tan imperfecto como quien tiene que cumplirla.
La ética, y por supuesto, la religión sirven para dar ejemplo a quien no tiene experiencia y muestran la diferencia entre los principios racionales que todos comprendemos pero que no siempre están presentes en nuestras leyes ni en las cabezas de nuestros legisladores. Me gustaría pensar sin equivocarme que esos principios racionales coincidentes con la ley natural son compartidos por todos, aunque no siempre son cumplidos. Estos supuestos racionales, por poner un ejemplo bien conocido, los diez mandamientos, son imprescindibles frente a doctrinas aparentemente respetables, pero difíciles de conciliar con el verdadero desarrollo humano.
No hace mucho tiempo, Dios habitaba en la cultura occidental. Hoy Dios es el gran ausente, aunque el europeo medio no suele echarle en falta. Hoy día no nos parece extraño que aquello que era fundamental hace años ahora no haga ninguna falta. Los hombres modernos, el hombre urbano, es tan prepotente que no le hace falta responder a las preguntas que supone la existencia o ausencia de Dios. Muchos viven cómodamente con respuestas parciales que responden preguntas fundamentales, soluciones sin contar para nada con Dios. La muerte, la vida y el sentido de ambas, sin Dios no tienen solución. No hablo de un Dios solucionador de problemas, hablo de un Dios que abre las fronteras del sentido y nos da algo en lugar de la nada que se nos da actualmente. La sociedad se ha instalado en una visión inmanente de la vida y el ser humano deambula entre creaciones humanas, construye ordenadores y proyecta viajar a Marte sin hacer el gran viaje hacia si mismo, el viaje que lleve al ser humano a transcenderse, a ir más allá de si mismo. La desesperación producto de la nada que nos da la vida moderna se acepta como un elemento más de la vida y nos inventamos entretenimientos para evadirnos de nuestra propia vida y de nosotros mismos. Son tiempos de indiferencia, hablaba antes de ateos y agnósticos, pero eso no es del todo cierto, lo que abunda en nuestra sociedad son los agnósticos, los que dudan y no buscan resolver la duda. Hoy día la fe no está de moda. La fe implica creer, creer que Dios existe o creer que Dios no existe, la fe, ya sea en positivo o en negativo, nos sitúa en una realidad inequívoca, sí o no. Hoy en día ni si ni no ni todo lo contrario. Decía Ortega y Gasset que la duda es estar en lo inestable, como en un terremoto indefinido. La duda nos arroja ante lo dudoso y basta dudar para que la realidad desaparezca de nuestros ojos. En tiempos como los de hoy en los que se duda de todo, la realidad también desaparece y hay que inventarla. Añadimos así a la desesperación, la realidad inexistente y la realidad inventada, todo ello producto del mismo error, alejar a Dios de los presupuestos fundamentales en los que basar la vida.Volvemos otra vez a la moral y a la ética. Todo este desbarajuste es en parte producto de una teología luterana en constante secularización, constantemente matando a Dios. Los filósofos educados en el luteranismo fueron los encargados de que el poder de Dios fuera sustituido por el poder del hombre. Desde Kant a Sartre pasando por Nietzsche se consagró la autonomía moral del ser humano, cometiendo una y otra vez lo que San Agustín llamó Pecado Original y que todos sabemos ya lo que es, la autonomía soberbia del hombre frente a Dios. Pero el hombre es por esencia un ser religioso, y a falta de Dios inventa la religión civil cuyos dogmas son, utilizando palabras de Rousseau en su famoso “El Contrato social”, la felicidad de los justos, el castigo de los malos, la santidad de la sociedad y las leyes, y como pecado la intolerancia. Hasta ese momento del s.XVIII la moral era un conjunto de consideraciones prácticas de la religión, unas normas. La moral tenía su fundamento en la ley de Dios, así, como decía Dostoievski, “si Dios no existe todo está permitido”. ¿Es la moral un freno? ¿Si falta el freno de Dios el hombre se convierte en un salvaje? Pues sí, Dostoievski tenía razón, así las cosas, la ética ocupa el lugar de Dios y se convierte en la variante laica de la religión, como dice Savater, la ética es la religión de los no creyentes. El freno sigue estando pero en forma de ley y viaja con nosotros dentro de nosotros. El fallo está en que nosotros lo regulamos, lo conectamos o lo desconectamos cuando queremos, es decir, que normalmente, el ser humano hace lo que se le pone en las narices siempre y tiene como único freno a la conciencia, mejor o peor educada, pero siempre existente y siempre personal e intransferible, es decir lo que nos dé la gana y sin preguntar por el prójimo.

¿Prefiero una ética y una moral religiosa o una ética y una moral laica? Si duda prefiero la religiosa, es segura, humana y cuidadosa con todos, también con el prójimo. Ah! y me da Algo en lugar de nada.

domingo, 13 de abril de 2008

Giovanni Palatucci



En 1909 nacía en Montella, en la región de Campania en Italia, Giovanni Palatucci. Acabó siendo policía en la Italia de Benito Mussolini. En 1937 ejercía su labor en la ciudad de Fiume, (hoy forma parte de Croacia), en el departamento de extranjeros.
En 2002, el Padre Gianfranco Zuncheddu, abrió la causa de beatificación donde se revelan detalles de este hombre que dio su vida para salvar aproximadamente unos cinco mil judíos durante la Segunda Guerra Mundial.
En un principio, Mussolini, desde que fue designado primer ministro en 1922, no practicaba ideas antisemitas, pero en 1938 el Duce cedió ante la presión de Hitler y decretó una serie de leyes anti-judías que incluían el encarcelamiento de judíos extranjeros recluidos hasta ese momento en campos de refugiados. Uno de los campos más grandes estaba ubicado en Campania, donde el tío de Giovanni Palatucci era Obispo, Monseñor Giuseppe María Palatucci.
El trabajo de Giovanni consistía en emitir los papeles de residencia necesarios requeridos por la ley para refugiados. Silenciosamente, comenzó a falsificar documentos y visados que permitían deportar oficialmente a los judíos, y se las ingenió para que fueran enviados a Campania, instruyéndolos para que contactaran con su tío obispo, quien les ofrecería el mejor auxilio posible.
En 1943, cuando los americanos encarcelaron a Mussolini, los alemanes de Hitler ocuparon el norte de Italia, incluido Fiume, y comprometiendo la situación de 3.500 judíos que todavía quedaban allí. Ese mismo año Giovanni Palatucci fue ascendido a jefe de policía y siguió con su labor de forma clandestina. Destruía expedientes sobre judíos para ocultarlos de los alemanes y advertía a la gente cuando conocía los planes nazis y frecuentemente les daba dinero y documentos falsificados para que pudieran huir. La situación de Giovanni empeoró cuando los alemanes se olieron algo y registraron su departamento buscado alguna información. Giovanni rechazó la ayuda del embajador suizo en Trieste, amigo suyo, que le ofrecía un paso seguro a Suiza, sin embargo, quiso que sí utilizara esta vía de escape su prometida, una joven judía que en la actualidad vive en Israel.
Baruj Tenembaum, creador de la Fundación Internacional Raoul Wallenberg, una organización que investiga las acciones de quienes arriesgaron o perdieron sus vidas para salvar a personas perseguidas durante la Segunda Guerra Mundial, explica: "El 13 de setiembre de 1944 fue arrestado por la Gestapo acusado de conspiración y enviado a prisión en Trieste donde fue condenado a muerte. Aunque su sentencia fue conmutada, un mes después fue trasladado al campo de exterminio de Dachau donde murió el 10 de febrero de 1945, pocas semanas antes de que el campo fuera liberado por los aliados".
Ni siquiera se sabe cómo murió, unos dicen que de hambre y otros dicen que fue disparado.... tenía 36 años.
Giovanni Palatucci es el que está sentado en el centro
Numerosas ciudades italianas, entre ellas Milán, Torino, Salerno, Trieste, Avellino o Roma tienen plazas o paseos con el nombre de Giovanni Palatucci. También hay una calle en Ramat Gan, cerca de Tel Aviv, en Israel, en honor a Palatucci.
Giovanni Palatucci decía a propósito de las leyes antijudías: “Quieren hacernos creer que el corazón es sólo un músculo, para impedirnos hacer lo que nuestros corazones y religión nos dictan”

sábado, 12 de abril de 2008

Eduardo Verástegui


Eduardo Verástegui era un actor de telenovelas y un cantante mexicano. Verdadero azote de adolescentes. Tiene 33 años y nació en Xicotencalt, al norte de México. Eduardo vive en EEUU y ha exprimido el precio de la fama a base de sobredosis de sexo y drogas, y ha visto cómo le llegaba la fama y cumplía sus “sueños”. Llega un momento en el que toca fondo y se le cruza por su camino Jasmine, una profesora de inglés que le enseñaba a expresarse correctamente para triunfar en Hollywood. Esta mujer es católica y le hace a Eduardo ir al fondo de su vida y despertar en él las últimas preguntas. Jasmine le dejó una herida abierta que fue cerrada por Dios. Eduardo, bajo la ayuda del sacerdote Juan Rivas, comienza a leer, a asistir a misa diaria, a rezar... comprendió que no había nacido para otra cosa que para conocer, amar y servir a Jesucristo. Eduardo en ese momento tenía 28 años y tenía a todo tipo de personas trabajando para él y para convertirse en el próximo “latin lover”. Tras las palabras de su profesora de inglés pasó tres meses llorando, en un estado de depresión y se dio cuenta de que estaba viviendo en una incoherencia total. A punto de entrar en un seminario, el sacerdote Juan Rivas le convence de que Hollywood es el sitio apropiado para un cristiano, “Allí donde está la oscuridad, ahí es donde debes estar porque si Dios cerró los ojos ahí necesitamos ser una luz en la oscuridad”. La historia de Eduardo Verástegui es una de esas conversiones que reclaman examen de conciencia y exigen revisión de la propia vida. ¿Si el pudo, por qué yo no?, se preguntarán muchos, otros se preguntarán, ¿Se trata de locura?. La respuesta no es fácil, tiene que ver con la actitud de correspondencia a la gracia que da Dios, al amor de Dios que es el mismo para todos. La fe no se tiene porque se quiere, la fe viene de Dios y se acepta. Cada uno actúa desde el puesto donde le ha tocado estar. Ninguno es innecesario porque en un cuerpo el corazón vale tanto como el cerebro, la vista o el tacto. Todo depende del fruto que sepamos dar según el papel que tenemos en la vida, del rendimiento que consigamos dar en nuestra vida a lo que recibimos de Dios.

Enlazo una entrevista en la que él mismo cuenta su historia, dura casi una hora pero prometo que vale la pena ganar 54 minutos de nuestra vida para escuchar este testimonio.

http://video.google.com/videoplay?docid=8695735224864343365


Brasil verdadero


Mons. Erwin Krautler, Obispo de Xingu, Mons. José Luiz Azcona Hermoso de Marajó; y Mons. Flavio Giovenale, Obispo de Abaetetuba, son tres obispos brasileños amenazados de muerte estos días. Los tres ejercen su ministerio en el Estado de Pará, al noroeste del país amazónico. Desde el mes pasado, un consorcio de hacendados y leñadores ofreció 500.000 dólares por la muerte de Monseñor Krautler por defender a los indígenas y protestar contra el apoderamiento de tierras, la esclavitud y la destrucción de la selva tropical. Monseñor Krautler ya estaba bajo protección policial desde 2007. Monseñor Hermoso, navarro de nacimiento, también se ha opuesto contra los devoradores de tierra. Y a monseñor Giovenale no le perdonan su denuncia el año pasado del encarcelamiento de una mujer adolescente en una misma celda con varios hombres en Abaetuba. La denuncias del obispo sirvieron para que la chica fuera liberada y los funcionarios de policía responsables fueran suspendidos.Se da la circunstancia de que en 2005 ya fue asesinada en ese mismo Estado de Pará la monja norteamericana Dorothy Stang por los mismos hacendados que ahora amenazan al los tres obispos. La Conferencia Episcopal Brasileña ha expresado su solidaridad con los prelados amenazados. “En Cristo somos uno solo con ellos y con las personas que ellos defienden: los pueblos indígenas, las mujeres, los niños y adolescentes, que son víctimas de explotación sexual, tráfico de seres humanos y consumo descontrolado de drogas".

sábado, 5 de abril de 2008

Bagdad - Irak

Un sacerdote cristiano ha sido hoy asesinado en pleno centro de Bagdad, según dijeron a Efe fuentes policiales iraquíes.
El padre Yusef Adel fue alcanzado por los disparos de unos desconocidos encapuchados que se dieron a la fuga.
El sacerdote era el párroco de la Iglesia de Mar Butros (San Pedro) en el barrio de Kerrada, en pleno centro de Bagdad, uno en donde tradicionalmente se ha concentrado la población cristiana iraquí.
El párroco se encontraba de pie en la puerta de su vivienda, cuando un grupo de desconocidos le disparó sin mediar palabra al filo del mediodía.
Los cristianos iraquíes son objeto de frecuentes ataques de la insurgencia, generalmente a manos de extremistas suníes.
El caso más grave se registró el pasado 13 de marzo, cuando el obispo católico caldeo Bulos Farach Raho, que había sido secuestrado dos semanas atrás, fue encontrado muerto en un barrio de Mosul, en el norte del país.

Fuente: http://www.lavozdegalicia.es/mundo/2008/04/05/00031207393971732902217.htm